Escrito : Vivi Pérez Zumbado. PhD
Afrontar y combatir una enfermedad tan desafiante como el cáncer amplifica tanto las dimensiones emocionales como físicas de cada individuo. El avance científico, que progresa a pasos agigantados, posibilita la supervivencia de muchos de estos valientes luchadores.
La complejidad del abordaje del cáncer ginecológico radica en múltiples factores, como el estadiaje tumoral, las características histopatológicas y las complicaciones que pueden surgir durante el tratamiento. Según datos del Observatorio de Cáncer a nivel mundial, en Costa Rica, el cáncer de próstata en hombres y el cáncer de mama en mujeres ocupan el primer lugar en incidencia. Estas enfermedades, con una prevalencia significativa, se asocian con implicaciones en la región pélvica, lo que puede comprometer la calidad de vida de los pacientes. Además, los cánceres ginecológicos, como el cáncer de cuello uterino, presentan desafíos adicionales. Por ejemplo, un estudio publicado en el Journal of Clinical Oncology encontró que hasta el 70% de las mujeres tratadas por cáncer de cuello uterino experimentan disfunción del suelo pélvico después de la cirugía y la radioterapia. Estos hallazgos destacan la importancia de abordar de manera integral las necesidades físicas y funcionales de los pacientes con cáncer ginecológico.
Es en este punto donde surge la interrogante: ¿Cuál es el papel de la fisioterapia en la salud pélvica? Para abordar esta cuestión, realicé una encuesta básica a ginecólogos y ginecólogas de Latinoamérica y Costa Rica, quienes respondieron a dos preguntas fundamentales:
Realizada por la Autora.
Es evidente la importancia que los especialistas en fisioterapia otorgan al tema. Al analizar las respuestas, se observa que la mejora en la función sexual es considerada de menor relevancia en comparación con otros aspectos. Sin embargo, sorprende que esta opinión no sea unánime, ya que algunos aún creen en su impacto positivo en una proporción significativa
La siguiente pregunta es :
Es oportuno hacer un llamado a la reflexión ya que se pueden apreciar los múltiples aportes que brinda la fisioterapia a las supervivientes pero esta no es incorporada en el proceso. Aquí es donde se debe comprender con mayor profundidad el papel que La fisioterapia juega en el tratamiento integral del cáncer ginecológico, proporcionando una serie de beneficios importantes para las pacientes.
Alternativas en que la fisioterapia es crucial en este contexto:
1. Prevención y manejo de linfedema: El linfedema es una complicación común después de la cirugía y la radioterapia en el cáncer ginecológico debido a la alteración del sistema linfático. Los fisioterapeutas pueden proporcionar técnicas de drenaje linfático manual, ejercicios específicos y educación para prevenir y manejar el linfedema, mejorando así la calidad de vida de las pacientes.
2. Rehabilitación pélvica. La cirugía y la radioterapia pueden causar disfunción pélvica, incluyendo dolor, disfunción sexual, incontinencia urinaria o fecal, y disfunción del suelo pélvico. Los fisioterapeutas especializados en rehabilitación pélvica pueden ayudar a las pacientes a fortalecer los músculos del suelo pélvico, mejorar la función sexual y controlar la incontinencia.
3. Manejo del dolor: El cáncer ginecológico puede causar dolor crónico y limitar la movilidad de las pacientes. Los fisioterapeutas pueden utilizar una variedad de técnicas, como terapia manual, ejercicios terapéuticos, electroterapia y terapia con calor/frío, para ayudar a reducir el dolor y mejorar la función física.
4. Mejora de la función física y la movilidad: La fisioterapia puede ayudar a las pacientes a mejorar su fuerza muscular, flexibilidad y capacidad cardiovascular, lo que puede ser especialmente importante antes y después de la cirugía y durante la recuperación del tratamiento del cáncer.
5. Apoyo emocional y bienestar general: El proceso de tratamiento del cáncer ginecológico puede ser física y emocionalmente agotador. Los fisioterapeutas pueden proporcionar apoyo emocional, educación y asesoramiento a las pacientes, ayudándolas a hacer frente a los desafíos físicos y emocionales relacionados con la enfermedad.
Entre las acciones explícitas que un fisioterapeuta puede realizar incluyen:
1. Evaluación inicial: Realizar una evaluación completa de la función física, la movilidad, la fuerza muscular, el dolor y cualquier otra preocupación física específica relacionada con el cáncer ginecológico, tanto desde una perspectiva global como localizada en el área pélvica . |
2. Educación: Proporcionar educación sobre el impacto del cáncer ginecológico en la función física y la calidad de vida, así como sobre las estrategias para minimizar los efectos secundarios del tratamiento y promover la recuperación. |
3. Prevención y manejo del linfedema: Enseñar técnicas de drenaje linfático manual, ejercicios específicos y medidas de autocuidado para prevenir y controlar el linfedema, una complicación común después de la cirugía y la radioterapia.
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4. Rehabilitación pélvica: Desarrollar un plan de tratamiento personalizado que incluya ejercicios de fortalecimiento y estiramiento para los músculos del suelo pélvico, así como técnicas para mejorar la función sexual y controlar la incontinencia urinaria o fecal. |
5. Manejo del dolor: Utilizar técnicas de terapia manual, ejercicios terapéuticos, electroterapia y terapia con calor/frío para ayudar a reducir el dolor relacionado con el cáncer ginecológico y mejorar la calidad de vida de los pacientes. |
6. Promoción de la actividad física: Diseñar programas de ejercicio personalizados para mejorar la fuerza, la flexibilidad, la resistencia y la movilidad de los pacientes, teniendo en cuenta su estado de salud y nivel de condición física.
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7. Apoyo emocional y bienestar general: Brindar apoyo emocional, asesoramiento y recursos para ayudar a los pacientes a hacer frente a los desafíos físicos y emocionales asociados con el cáncer ginecológico, promoviendo así su bienestar general. |
Sobrevivir a la adversidad es un deseo compartido por muchos, pero a menudo se descuida el objetivo de vivir con calidad de vida. Es crucial trabajar de manera integral e interdisciplinaria, ya que los seres humanos no son simplemente piezas de un rompecabezas, divididos por especialidades o tratamientos. Al unificar conocimientos y experiencias, podemos mejorar el bienestar de cada individuo que requiere nuestro apoyo como profesionales de la salud.
Gracias por acompañarnos en este viaje de descubrimiento! Esperamos que hayas encontrado útiles nuestras ideas y consejos. Si tienes alguna pregunta, comentario o simplemente quieres compartir tu experiencia, no dudes en ponerte en contacto conmigo. Estoy aquí para ayudarte. Puedes enviarme un correo electrónico a vivi@suelopelvicocr.com o encontrarme en las redes sociales: @suelopelvicocr. ¡Espero verte pronto en nuestra próxima publicación!"
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